El artículo de la mujer consciente que se rinde al patriarcado, refleja una gran verdad. Y es verdad porque es la lucha de un individuo SOLO, contra un SISTEMA, que como el monstruo de 1000 cabezas se le atraviesa en todas partes. Por eso se necesitan los movimientos sociales, la organización, la concienciación constante y la lucha colectiva permanente. Pero además valentía individual pues así como ella se acomoda al statu quo, lo hacen todos los demás en las otras esferas, en el trabajo, en la universidad, en la actividad intelectual, hasta en la acción social (lo que denunciamos del posmodernismo como una acción de "izquierdas" muy cómoda y funcional al sistema). Muy buen testimonio, pero asqueante constatar en la misma página de El País, como se articula la denuncia con la lógica del capitalismo: cada dos párrafos aparece la propaganda de Penguin Random House y hasta del libro que es del tal sello editorial.
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